¡Tatachán!
Señoras y señores, caballeros y caballeras, hay luz al final del
túnel. Existe la vida después de la muerte. Podemos respirar
tranquilos, tenemos desfibriladores para todos. Cuando escribo estas
humildes líneas, desconozco si finalmente hemos sido rescatados. No
importa, tenemos los primeros brotes verdes.¿Qué no? Pase lo que
pase, comienza la Eurocopa, con ello, la selección española
iluminando los tristes rostros de parados, desahuciados, arruinados y
afectados de la gran estafa a la que estamos siendo sometidos. Todo
se dejará de lado, nos concentraremos en lo realmente importante, la
conquista de Europa, deportivamente hablando.
El
lunes, nos importará un carajo la prima de riesgo, el ibex 35 y lo
que diga el fondo de chorizos monetario internacional. Lo relevante
será si le hemos dado bien a los italianos, si Torres ha jugado o si
el arbitro nos ha ayudado en la liberación de endorfinas mientras
mentábamos a su madre -algún día esta sociedad deberá de
reconocer el trabajo de los trencillas en la liberación del estrés
en la ciudadanía-. Ahora, alguno pensará, pues como perdamos el
primer partido caeremos en las profundidades del desánimo y la
tragedia. Para nada, tenemos margen. El avispado lector, conoce
perfectamente la idiosincrasia de estos torneos, muerdes el polvo al
principio para después levantarte y golpear con mayor contundencia.
Miren el mundial.
Por
tanto, como decía, estamos ante esos archiconocidos brotes verdes.
Será el comienzo del resurgir del nuevo imperio español. Si pasamos
la primera fase, esos brotes verdes pasarán a transformarse en
tallos. Con ello, los ciudadanos nos uniremos para remar en la misma
dirección, apoyaremos ciegamente las medidas para que los banqueros
ganen más viruta, perdonaremos el estado de corrupción generalizado
en la política, quien sabe si incluso los obispos se abrazarán a
los homosexuales y en un alarde de bondad van y pagan el impuesto de
bienes inmuebles. En definitiva, se crearán los pilares firmes sobre
el cual se formará nuestra nueva sociedad. Una sociedad grande,
libre¡Uis! Perdón que se me va la pinza.
Después
llegarán las eliminatorias. Más madera. Aquí cada partido es un
todo nada. El reflejo de las grandes batallas, muerte o gloria. El
Trafalgar o el Bailén futbolístico. Seguir adelante, supone otro
arreo para nuestra denostada sociedad. Aquí, la situación se podría
reflejar con los indignados, se concentrarían en la Puerta del Sol y
con cada gol se abrazarían con los policías que habitualmente les
rodean e incluso, un gol en semifinales haría que los delegados del
gobierno en las distintas ciudades, ordenaran la retirada de las
fuerzas de orden público y ellos fueran llevados a hombros por los
propios indignados. Perdonen, admirados lectores, que llegado este
momento mis ojos muestren un vidriado especial, la emoción me
supera.
Finalmente,
estamos en la final. El rival nos da igual. Nuestros gladiadores del
esférico no tienen miedo a nada. Alguno de nuestros admirados
guerreros, rememorará Waterloo y enviará la bala de cañón al
fondo de las mallas. Gloria. Aquí, en Morón, como no puede ser de
otra forma, tendrá su consecuencia. El Mosqui, presentará en el
pleno una moción para que no se controle nunca más el dinero
publico y como gesto de buena voluntad, pedirá cobrar como los
políticos tradicionales. Una maravilla. Como digo los brotes verdes
han llegado. Esperemos no caer en la primera fase.
Sit tibi terra levis.
Oye, Marcos. Muchas gracias por cada uno de tus artículos, que para mí suponen una bocanada de aire fresco, que me permite más una de una sonrisa. Admiro tu ironía y sentido del humor.
ResponderEliminarEstimado Miguel:
EliminarLo primero darte las gracias por tus palabras en este comentario. Para mí también supone una vía de escape, una forma de dejar salir las opiniones de muchas personas. En el fondo simplemente es mostrar lo que escucho en la calle.
Saludos.
P.D: Si lees el primer artículo con el que comencé esta aventura, supongo que el título te sonará de algo.
ESTIMADO MARCOS, SOLO UNA PREGUNTA:¿TE HAS TOMADO LA PASTILLITA?, TIO, RESPIRA PROFUNDAMENTE Y RELAJATE,YA SABES,TUS CORONARIAS.....
ResponderEliminarEstimado anónimo:
EliminarTengo que decirte que ya no hace falta pastilla alguna. El mejor entrenamiento para poner el corazón a tope es ver un telediario cada día. Si lo soportas, tu corazón se vuelve fuerte e incluso insensible.
Saludos.